Indemnización para bombero que trabajaba en un incendio y se lesionó al caer a un canal de riego

Finalizaba el año 2021 y los campos cercanos a El Cóndor sufrían la sequía. El trabajo de los bomberos se multiplicaba. El cuartel recibió un llamado para concurrir a un incendio en las cercanías de la villa marítima.

 

Un bombero de Viedma, que integraba la plantilla de la Policía de Río Negro, estaba sofocando el fuego cuando hizo un paso hacia atrás sin ver un canal de riego de un metro de profundidad. Cayó, torciéndose la rodilla de la pierna derecha.

La Aseguradora de Riesgos de Trabajo (ART) lo atendió. Se le diagnosticó una lesión de menisco interno y de ligamentos cruzados. Debió someterse a una intervención quirúrgica y una dificultosa rehabilitación hasta que se le dio el alta médica.

El bombero solicitó la intervención de la Comisión Médica n° 18. Tras el examen le ponderó un índice de incapacidad. Sin embargo, un informe médico que pidió el trabajador le indicó que la incapacidad era mayor, lo que repercute en el monto indemnizatorio.

De esta manera, inició una demanda laboral. La ART reconoció el siniestro, al que calificó como “un traumatismo leve de rodilla derecha”. Dijo que realizó las atenciones correspondientes.

Una perita médica independiente intervino. Realizó una entrevista personal y un exhaustivo examen físico. “El diagnóstico es principalmente clínico. Los estudios de diagnóstico por imágenes, sobre todo la Resonancia Magnética, pueden ayudar a confirmar el diagnóstico. La mayoría de las lesiones de primer grado o de segundo grado moderadas pueden tratarse inicialmente mediante reposo, hielo, compresión y elevación, incluyendo inmovilización de la rodilla”, explicó.

“Por lo general se promueven los ejercicios de amplitud de movimiento tempranos. Los esguinces de segundo grado graves y la mayoría de los de tercer grado requiere yeso durante 6 semanas o más. Algunas lesiones de tercer grado del ligamento colateral medial, y del ligamento cruzado anterior, requieren reparación quirúrgica artroscópica”, explicó.
Finalmente, dictaminó una incapacidad parcial y permanente del doble de lo diagnosticado inicialmente.

De esta manera, la Cámara Laboral de Viedma ordenó a la aseguradora que abone la indemnización correspondiente derivada del accidente laboral.