Un hombre fue condenado a cuatro años de prisión efectiva por cometer distintos hechos de violencia física y psicológica contra su expareja.
El primer hecho ocurrió el 21 de noviembre de 2023. Ese día, el hombre agredió a la mujer con golpes de puño y patadas en el cuerpo. Como consecuencia de la golpiza, la víctima sufrió múltiples hematomas. Luego, la amenazó de muerte con un arma blanca.
Dos días después, el agresor ingresó al domicilio de la mujer en Villa Regina. Exhibió un arma de fuego y obligó a ella y a la hija de ambos a subir al auto. La mujer, con temor, preparó un bolso, y el hombre las trasladó a la localidad de Tres Arroyos. Allí las retuvo contra su voluntad hasta que finalmente las regresó a Villa Regina.
El personal policial se presentó para constatar el estado de salud de la mujer y de su hija. Al salir del domicilio, el agresor empuñó un cuchillo e hirió a un agente. Fue detenido y se dictaron medidas cautelares que no cumplió. Finalmente, quedó en prisión preventiva.
El fallo determinó que el hombre es culpable del delito de lesiones leves calificadas por el vínculo y por haber sido cometidas contra una mujer, mediando violencia de género, y de amenazas con armas. También fue condenado por violación de domicilio, amenazas coactivas con armas y privación ilegítima de la libertad agravada.
La pena incluyó los delitos de atentado contra la autoridad, agravado por el uso de armas, lesiones leves agravadas contra las fuerzas de seguridad y desobediencia a una orden judicial.
El tribunal estuvo integrado por los jueces Luciano Garrido, Alejandro Pellizzón y Sandro Martín. La fiscal del caso fue Irma Vanesa Cascallares y la defensa del imputado estuvo a cargo de Leonardo Ballester.
El tribunal valoró como agravantes la naturaleza de la acción, la pluralidad y la gravedad de los hechos. En relación con la mujer, se consideró el aprovechamiento de su estado de vulnerabilidad.