Las ilusiones de una viedmense de perfeccionarse en la práctica de las acrobacias con tela se vio trunca cuando compró a través de Instagram un trípode de hierro para la actividad, pero nunca lo recibió. Más adelante, comprobó que muchas otras personas habían sido engañadas por la empresa.
Visitó en la red social “Estructuras El Mágico Circo Argentino”. Abonó 300.000 pesos en dos pagos. Le informaron que el producto sería enviado al mes siguiente, lo que nunca ocurrió.
Ante sus reclamos por la falta de entrega, le respondían con evasivas y excusas insólitas. Investigó por internet y descubrió que la misma cuenta había estafado a muchas personas mediante la red social Facebook. Por esta razón, decidió presentar una denuncia de menor cuantía en el Juzgado de Paz de Viedma.
El juez de paz consideró como prueba capturas de chats de Instagram y WhatsApp, así como los comprobantes de pago por importes de 100.000 y 200.000 pesos efectuados a la cuenta del responsable de la empresa.
En el fallo se determinó que de acuerdo a las conversaciones aportadas por la clienta las partes mantuvieron una comunicación intermitente durante más de dos meses. Se pudo comprobar que desde el perfil de Instagram “Estructuras El Mágico Circo Argentino” le informaron sobre las características del producto y las condiciones de pago.
Sin embargo, se observó “un claro desinterés y maltrato” hacia los derechos reclamados por la clienta, evidenciando un modus operandi contrario al régimen de protección al consumidor vigente.
El magistrado afirmó que “la demandada violó el régimen consumeril y que su proceder desinteresado respecto a los derechos de la actora contribuyó a su desgaste emocional, no solo por los malos tratos y la falta de respuesta, sino también por forzarla a acudir a esta instancia para hacer valer sus derechos como consumidora”.
Finalmente, el juez de paz condenó al titular del comercio “Estructuras El Mágico Circo Argentino” a devolver el dinero actualizado, más el daño moral.